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Candidatura al Premio al Mérito
Ecológico. Resumen y
documento en extenso sobre los
aportes de la UASLP, con algunos
anexos de información detallada.
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Cuestionario “Educación para el
Desarrollo Sustentable”
SEP-SESIC-DGES Compendio de
acciones sobre medio ambiente y
sustentabilidad en la UASLP
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ambientales y/o sobre la
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política, UASLP:
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Mérito Ecológico 2006
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Folleto informativo del Día
Mundial del Medio Ambiente
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Catálogo de Programas y Proyectos
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Ambiental
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¿Cómo asume este Premio la UASLP?
La UASLP
asume este Premio como un reconocimiento al esfuerzo de toda
la comunidad universitaria que, de una u otra manera, se ha
involucrado cada vez más en iniciativas que buscan proteger
el medio ambiente y construir la sustentabilidad, tanto en
las funciones docentes, de investigación, de vinculación y
extensión, y de gestión.
Además, este Premio exige a los universitarios la
responsabilidad de incrementar nuestro compromiso hacia la
sustentabilidad como un elemento fundamental de la
pertinencia y calidad de las funciones sustantivas de la
UASLP. Los desafíos que enfrenta la Universidad en este
sentido, son todavía más grandes que los aportes y logros
mencionados.
Discurso Lic Mario
García Valdez
Rector de la
Universidad Autónoma de San Luis Potosí
Ceremonia de Entrega del Premio al Mérito Ecológico
Chihuahua, 5 de Junio de 2006
Sr.
Vicente Fox Quezada, Presidente de los Estados Unidos
Mexicanos; Lic. José Reyes Baeza Terrazas, Gobernador del
Estado de Chihuahua; Ing. José Luis Luege Tamargo,
Secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales;
distinguido presidium y miembros del Consejo Consultivo
Nacional para el Desarrollo Sustentable:
Pensar la
sustentabilidad es pensar el futuro, el presente y el
pasado, bajo los principios de equidad, justicia, democracia
y calidad de vida. El futuro, porque necesitamos imaginar,
creativa y colectivamente, los modelos alternativos que
podemos construir en lo social, lo económico, lo ambiental,
lo productivo y lo científico-tecnológico, para convivir
armónicamente entre nosotros y con la naturaleza. El
presente, para reconocer nuestra realidad críticamente,
identificar la distancia que nos separa de nuestras
aspiraciones y definir los pasos que debemos dar como
comunidad y como individuos. El pasado, para reconocer el
origen; la historia de los problemas que nos aquejan y de
los desafíos que nos planteamos.
La distancia que todos los países tenemos hacia la
sustentabilidad es tan grande, que podríamos sentirnos
escépticos ante la magnitud y complejidad de los retos que
se tienen que enfrentar. Ni el enorme poderío científico
técnico, ni los modelos económicos vigentes, han logrado
superar los graves problemas pendientes de la humanidad. Por
el contrario, todos conocemos las evidencias que muestran
cómo estos problemas se han exacerbado, por ejemplo, al
dedicar la mayor parte de los recursos provenientes del
desarrollo, a la militarización del planeta o al crecimiento
de sociedades opulentas cuyas condiciones de vida contrastan
dramáticamente con los altísimos niveles de pobreza y
marginación que existen en el mundo.
Un nuevo paradigma implica recobrar nuestros sueños y
valores. Tendremos que imaginar visiones de futuro globales
y regionales y comprometernos con ellas. Por un lado,
aspiramos a construir una sociedad global capaz de vivir en
paz y equidad, bajo los principios de tolerancia y respeto a
la diversidad cultural. Al mismo tiempo necesitamos
fortalecer las comunidades y las regiones para basar su
desarrollo en la gestión endógena y democrática de su
patrimonio ecológico y cultural. En este contexto, lo menos
difícil es fortalecer y aprovechar el acervo científico y
técnico, aunque habrá que redirigirlo para obedecer los
mandatos sociales, y así desarrollar tecnologías regionales
sustentables en armonía con la naturaleza y construir la
sociedad que nos propusimos.
No cabe duda de que “rescatar” nuestro futuro requiere
cambios profundos. Estos cambios requieren la construcción
de propuestas y soluciones específicas que conduzcan a ese
futuro posible. Afortunadamente, existen organizaciones y
personas que siguen apostando a la esperanza y a la
construcción de alternativas, en el corto y largo plazo,
implicando todos sus recursos, sus energías y su tiempo. Hay
personas que dedican su vida, que comprometen todos sus
proyectos, que sacrifican otras recompensas, para perseguir
este desafío. También hay organizaciones, tanto públicas y
sociales como empresariales, que en los hechos muestran su
compromiso con la sustentabilidad.
Estos esfuerzos deben trascenderse a sí mismos, pues
persiste el desafío de construir visiones coherentes y
relativamente precisas sobre cómo sería una sociedad
sostenible y cuáles serían las estrategias de transición.
Sin esas visiones y estrategias, difícilmente podremos
generar la voluntad política o el esfuerzo colectivo
necesario para llevarnos de aquí para allá.
El premio que recibimos hoy es un reconocimiento a la
sociedad mexicana en su conjunto, por la convicción que
muestra a través de sus empresas, organizaciones civiles,
investigadores e investigadoras, ciudadanos y ciudadanas, e
instituciones educativas, que día a día contribuyen a
construir ese futuro sostenible, aún a sabiendas de las
dificultades que entraña.
En
lo particular, me corresponde el alto honor de hablar a
nombre de los cinco que recibimos el Premio al Mérito
Ecológico: La Dra Blanca Jiménez Cisneros, investigadora de
la UNAM; La Flor de Catemaco, S de RL de CV, por el sector
empresarial, de Veracruz; el Grupo para Promover la
Educación y el Desarrollo Sustentable AC, por el sector
social, del Distrito Federal; La Sra Bárbara Mackinnon
Haskins en la categoría individual, de Quintana Roo; y, por
supuesto, nuestra Universidad Autónoma de San Luis Potosí
por el sector educativo, de San Luis Potosí. Estoy seguro
que para todos nosotros este premio representa una mayor
responsabilidad con el futuro. Nuestro agradecimiento al
jurado y a la Semarnat, por esta convocatoria, por el arduo
trabajo de evaluación y, por lo que a mí toca, por la
honrosa compañía en que nos encontramos hoy aquí, con los
otro cuatro galardonados, los consejeros y consejeras del
Consejo Consultivo Nacional para el Desarrollo Sustentable y
otros invitados distinguidos.
La Universidad Autónoma de San Luis Potosí, la primera
universidad que recibe este premio nacional, lo recibe en su
carácter de universidad pública estatal, como un estímulo
para todos los profesores, estudiantes, autoridades y
trabajadores que a lo largo de los últimos veinte años han
trabajado arduamente en todos los ámbitos, para incorporar
la perspectiva ambiental y de la sustentabilidad en todo el
quehacer académico y de gestión. También representa un
compromiso, pues a partir de ahora deberemos multiplicar y
ampliar nuestros esfuerzos, con la confianza de que partimos
de institución sólida, que recoge lo mejor de sus
tradiciones académicas y se proyecta hacia el cambio, la
innovación y el futuro.
La incorporación de la sustentabilidad como un principio
fundamental del quehacer universitarios es ya una
reivindicación en los ámbitos internacional y nacional.
Desde muy diversos espacios como la UNESCO, la ONU, la
Conferencia Mundial de Educación Superior, la ANUIES y la
SEMARNAT, desde hace tiempo se insiste en el papel esencial
que tiene la educación superior para alcanzar la
sustentabilidad. Doce rectores de universidades públicas y
privadas mexicanas, integrantes del Consorcio Mexicano de
Programas Ambientales Universitarios para el Desarrollo
Sustentable (Complexus), suscribimos públicamente varios
compromisos en este sentido en febrero de este año.
Las universidades públicas debemos asumir la sustentabilidad
como un nuevo principio universitario que nos guía para
cumplir mejor nuestra función social. Esto implica
incorporarlo sistemáticamente a los criterios de calidad,
equidad y pertinencia con que desarrollamos nuestros
programas académicos. Pero también como espacios
privilegiados para la discusión de las ideas y la generación
del conocimiento. En síntesis, las universidades debemos
contribuir a la construcción de las visiones que nos
permitirán convertir en una realidad el futuro que deseamos.
Y si bien hemos invertido un gran esfuerzo en este proceso,
también nos hemos emocionado y divertido, y eso es lo que
les deseo a todos.
Muchas gracias
Enlaces
¿Qué es el Premio al
Mérito Ecológico?
¿Cómo
concursó la UASLP?
¿Por qué obtiene el premio la UASLP?
¿Cómo asume este premio la
UASLP?
Fotos de la entrega del premio
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